Mario Casas, protagonista de Molt lluny: "Me enamoro de los proyectos, personajes e historias de los directores"

Entrevista a Mario Casas

FlixOlé se desplaza a Málaga para entrevistar a Mario Casas, que presenta en el festival su última película Molt Lluny. Dirigida por Gerard Oms, retrata el drama de la inmigración precaria española en algunas zonas de Europa

El personaje al que interpretas en Molt lluny hace un viaje externo e interno durante la película, ¿qué te ha aportado este personaje y este viaje a ti como actor?

Me ha dado, sobre todo, tener la oportunidad de trabajar en Utrecht, de irme junto con el equipo a un lugar desconocido de Holanda durante seis semanas. Vivir allí, que es lo que hicimos durante este tiempo, es muy diferente porque al final culturalmente somos diferentes. Entonces ha sido como un viaje que iba a la par del que le pasa al personaje.

Además, nos desplazamos con un equipo reducido y ha sido una aventura, pero estoy muy feliz con el resultado de la película. Sobre todo por el director, Gerard Oms, que ha sido su primera peli. Creo que es un cineasta al que vamos a seguir, seguro, porque sabe contar historias. En definitiva, estoy muy contento de formar parte de este proyecto y haber hecho este personaje.

Gerard además era tu acting coach ¿Cómo te hizo llegar este personaje y por qué lo aceptaste?

Hace cinco años nos conocimos en No matarás y vi el talento que tenía. En una conversación entre ambos le dije, “¿por qué no diriges?”. Yo veía que había un director ahí y me dijo que tenía alguna idea pero que no se atrevía, que qué hacía él dirigiendo. Y recuerdo haberle dicho, “si me traes en guion, un personaje para el cual pueda darte el perfil, yo te hago la peli.” Y así fue.

 A los años tenía un guion y yo, sin leerlo de primeras, ya le dije que sí. Me contó un poco y yo le dije que quería hacerlo. Y lo deseaba porque sabía cómo lo iba a contar, sabía el proceso que iba a vivir con él en lo que crear el personaje se refiere. Sabía que iba a haber un resultado muy bueno, y desde el primer momento le dije que sí.

Mario Casas protagoniza 'Molt lluny'

Un viaje hacia el corazón de Europa

Estamos hablando de uno de tus papeles más autorales ¿Qué ha aportado a tu carrera?

Para mí, lo mismo que otro proyecto. Realmente no me acabo de fijar en si es un género, si es un tipo de peli u otra… Yo me enamoro de los proyectos, de los personajes y de las historias que quieren contar los directores. Y, en este caso, Gerard contaba una película más pequeña, autoral, una película indie y por eso me he sumergido en ella. Lo que me gusta es lo que cuentan, la composición del personaje y cómo sacarlo hacia fuera.

Sobre ese viaje por Países Bajos con Molt lluny ¿Qué anécdotas te traes del rodaje?

Utrecht es precioso, lo recomiendo para ir a visitar, pero todo son bicis. Recuerdo que me querían al principio ir a buscar en coche para ir al set o los ensayos y, claro, tardabas una hora para poder llegar a las localizaciones. Cuando veo que la gente iba en bici y que tardaba 5 minutos en ir al set, fui y volví todos los días en bici y me acabaron robando la bici como al personaje. Yo la dejaba puesta en una farola, cuando hay parkings para bicis… Bajé un día y la bici ya no estaba. Fue gracioso porque al personaje le pasa lo mismo.

 Pasaron muchas cosas. Nos tirábamos a las calles de Utrecht a rodar: fue duro por el tiempo sobre todo, nos llovió todos los días y no se podía parar. Fue un poco rodaje de supervivencia: se transmite y se respira cuando ves la peli.

Es una película muy autobiográfica por parte del director."

Tu personaje tiene algo de biográfico del director ¿Te trasladó sus experiencias para construir el personaje?

Gerard me hablaba todo el tiempo del viaje que había hecho, también estuvo en Utrecht. Al 70% es autobiográfica. Entonces me hablaba de cómo fue y vivió él todo ese proceso. Sí que es verdad que yo tenía muy claro lo que quería contar sobre el personaje, y nuestro trabajo fue más volver a la adolescencia. Es decir, él vive algo con 35 años, cuando lo debería haber vivido de adolescente.

 Empezamos a trabajar sobre la idea de qué hubiese sido de mí, si no hubiese sido actor y me hubiese quedado en Barcelona y hubiese huido cómo huyó el personaje. Entonces el punto de partida fue ese, e intentamos trabajar todo desde ahí.

Entrevista a Mario Casas en el Festival de Málaga
Mario Casas durante la entrevista de FlixOlé en el Festival de Málaga

Un año completo y esperanzador

En lo que va de 2025 estrenas, o vas a hacerlo, hasta cuatro películas ¿Es un gran momento para ti?   

Sí. El secreto del Orfebre es un drama romántico, Muy lejos es una peli más autoral, La cena, una comedia… Son proyectos distintos entre ellos y que directores o productores quieran contar conmigo para hacer películas o personajes diferentes entre sí, es de agradecer.  Zeta, que aún no se ha estrenado, es un thriller de acción… Muy afortunado de hacer lo que me gusta y de poder seguir interpretando.

En FlixOlé tenemos algunas de tus primeras películas: El camino de los ingleses y Mentiras y gordas; también títulos de Álex de la Iglesia: Las brujas de Zugarramurdi  y Mi gran noche ¿Qué recuerdos te vienen al mencionar estas películas?

Uff, me dices Álex de la Iglesia… Me encantaría volver a currar con él. No hemos vuelto a trabajar, pero Las brujas de Zugarramurdi y Mi gran noche son algunos de los personajes que más he disfrutado y más me he podido reír de mí mismo. Y he aprendido mucho con él. Recuerdo con Mi gran noche ese Adanne que hice, el baile del torero…  Pasas una línea de la no vergüenza que te hace aprender muchísimo, y eso sólo te pasa con Álex.

 También me has nombrado El camino de los ingleses, rodada aquí en la Málaga de Antonio Banderas, su director. Además, fue mi primera peli y guardo un recuerdo increíble de ella y de Antonio, con quien además tengo relación, es amigo. Realmente, todas las películas que he hecho, hayan sido más o menos duras, las amo. Algo me han enseñado y aportado cada una de ellas. Al final creces en cada personaje que haces, en cada proyecto.

...Y si te has quedado con ganas de más