La leemos en la revista CINEMANÍA, la podemos ver en sus habituales colaboraciones con el programa de RTVE ‘Historia de nuestro cine’ y, ahora, también la podemos escuchar en su nuevo Podcast ‘Mi vida en películas’. La periodista Andrea G. Bermejo, quien además se estrenó como cineasta codirigiendo el documental El hombre que diseñó España (2019), es nuestra invitada de este mes en Las favoritas de… Andrea G. Bermejo en 10 películas, con varios clásicos y algunas rarezas a reivindicar de nuestro catálogo:
María Rosa (Armando Moreno, 1963)
«Una gran joya desconocida del cine español. La única película dirigida por Armando Moreno, marido y representante de Nuria Espert que nunca más volvería a dirigir cine. A pesar de haber demostrado con esta película ser un cineasta en mayúsculas, un cineasta que bebe de John Ford, del cine negro, del neorrealismo y del expresionismo, hasta del spaghetti western, pero logrando una voz propia, fuertemente autoral. Protagonizada por la actriz y Paco Rabal».
Los flamencos (Jesús Yagüe, 1968)
«Fascinante flamenco noir. Potente documento por su retrato del Madrid de finales de los 60 y de los bajos fondos del mundo del flamenco. Con un Julián Mateos en uno de sus mejores papeles, justo antes de abandonar la interpretación y producir grandes obras maestras como Los santos inocentes o El viaje a ninguna parte».
La comunidad (Álex de la Iglesia, 2002)
«Álex de la Iglesia en estado de gracia. Aquí conjuga su gran fuerza como cineasta renovador del cine español, esa que le hizo despuntar en los años 90, con su amor por el patrimonio fílmico a través de ese reparto monumental. Carmen Maura y Emilio Gutiérrez Caba están en la cima de su carrera. Y no se puede explicar mejor lo que es una comunidad de vecinos en España ni cómo debe de ser una comedia negra patria.».
¡Vámonos, Bárbara! (Cecilia Bartolomé, 1978)
«La primera película feminista de la historia del cine español. Con Amparo Soler Leal como mujer liberada que abandona a su marido adúltero y emprende un viaje de carretera con su hija. Me encanta todo de ella: lo libre que es, lo alegre y vitalista. Como todo el cine de Cecilia Bartolomé tiene secuencias brillantísimas: como la de las señoras persiguiendo al autobusero. Y además, mejora el original de Scorsese en el que se inspira (Alicia ya no vive aquí) con un final mucho más moderno y feminista.».
Función de noche (Josefina Molina, 1981)
«Palabras mayores. Josefina Molina, la chica buena de la Escuela Oficial de Cine, se desmelena con esta obra crudísima en fondo y forma sobre las insatisfacciones más profundas de la mujer. La directora aprovecha una representación de Cinco horas con Mario para confrontar a la actriz Lola Herrera con su marido, Daniel Dicenta.».
Topical Spanish (Ramón Masats, 1970)
«Una maravilla que debería ver cualquier musiquero que se precie. La única película de ficción de Ramón Masats, a la altura de sus mejores fotografías. La huida de Jesús del seminario y su unión a un grupo de música (Los íberos) que ensaya en casa de su abuela es la excusa perfecta para dar rienda suelta al cine yeyé más estiloso y elegante de nuestra cinematografía.».
Mi vida sin mí (Isabel Coixet, 2003)
«Una de mis películas favoritas del cine español. Recuerdo salir muy emocionada de los cines Renoir sin tener ni idea de que la película la había dirigido una directora española ni que ese cine tan internacional, tan cosmopolita, tan parecido al cine que me gustaba entonces, se podía hacer también aquí. Mi flechazo con Mark Ruffalo empezó aquí».
La tía Tula (Miguel Picazo, 1964)
«Para mí, la mejor película de Miguel Picazo y el gran personaje de Aurora Bautista. Lleva todos sus papeles de heroína franquista incorporados a su interpretación de la tía Tula, esa pobre mujer que encarna la represión sexual como ninguna en esta adaptación que supera con creces la obra de Unamuno. Ese final en la estación de tren es de los que te deja clavado a la butaca.».
El mundo sigue (Fernando Fernán Gómez, 1963)
«La gran obra de Fernando Fernán Gómez. El choque entre dos hermanas (Gemma Cuervo y Lina Canalejas, soberbias) que han elegido vidas opuestas sirve de microcosmos para contar la miseria de la España del franquismo. Tan buena y feroz que fue prohibida durante décadas convirtiéndose en una película maldita hasta hoy.».
El verdugo (José Luis García Berlanga, 1963)
«No he podido resistirme a incluirla. El verdugo es mi película favorita de Berlanga. Y Berlanga tenía que estar en esta lista. Nino Manfredi, Pepe Isbert, Emma Penella, Azcona… ese plano en picado desde la torre de la cárcel, historia del cine. Que además, según me contó Cecilia Bartolomé, está rodado así porque el personal le prohibió rodar desde abajo. Genio y figura.».